El gobierno local apuesta nuevamente a proyectos que benefician a particulares por sobre los intereses de la comunidad. El Partido Socialista cuestiona a la administración que encabeza Marcelo Bisogni, a la que acusa de abandonar deliberadamente los espacios que son de todos y sólo planificar los negocios privados.
El Partido Justicialista, que gobierna la ciudad desde hace 23 años, demuestra una vez más su incapacidad para solucionar los problemas que padecemos los uruguayenses, al mismo tiempo que vuelve a confundir lo público con lo privado.
Este nuevo megaemprendimiento que se aprobó en el Concejo Deliberante, por intermedio de la mayoría automática, que habilita al Ejecutivo a llamar a licitación para el traslado de la terminal y el regalo por 50 años del edificio del ex Mercado Municipal, demuestra una vez más que al PJ gobernante poco le interesan los intereses de la población.
Desde el Ejecutivo y desde el Concejo se negó la posibilidad de realizar una Audiencia Pública para debatir acerca de la conveniencia de este negociado inmobiliario.
El modelo de desarrollo del gobierno local es la timba, que es lo que se llevará a cabo en el ex Mercado Municipal, de llamativa similitud con el negocio de las máquinas tragamonedas que han crecido a lo largo de todo el país de la mano de los amigos del gobierno nacional. A esto se agrega el deliberado abandono de espacios públicos, a esta altura imposible de no ser atribuido a la indiferencia o a la incapacidad del justicialismo. El simple repaso por la interminable lista de espacios de la comunidad que son abandonados por el PJ gobernante llena de asombro (cuando no de vergüenza, si se le muestra a un visitante): el Banco Pelay, el otrora Parque de la Ciudad convertido casi en vertedero, el Parque de La Loba, la Salamanca destruida, los bungalows arrasados, todos los accesos importantes convertidos en asentamientos de mini basurales, la Avenida Paysandú semejando un erial, la Defensa sin mantenimiento, cada plaza o parque progresivamente librado al azar, la Terminal de Omnibus, el acceso a la ciudad, la Oficina de Turismo, el estado deplorable de la mayoría de las calles de la ciudad, las obras realizadas a medias o rajadas a minutos de su inauguración, configuran postales lamentables de una ciudad que decididamente merece otra suerte.
Desde el Partido Socialista seguiremos insistiendo una y otra vez en la necesidad de generar una sociedad más justa y solidaria, que de respuestas a las necesidades que tienen la mayoría de los uruguayenses.
La ausencia de planificación, la ausencia total de política de turismo, el crecimiento geométrico de mini basurales en cada esquina de la ciudad, la falta de agua potable y cloacas que padecen miles de vecinos, los graves problemas ambientales irresueltos por el gobierno local, la recuperación de cada espacio público abandonado por el peronismo gobernante, son las prioridades a la que debemos abocarnos.
Sin participación de los distintos sectores de la ciudad no habrá posibilidades de encontrar soluciones a estos problemas, herramienta que desconoce la gestión local, que en siete años de gobierno no ha convocado una sola vez al pueblo a debatir, ni ha hecho públicos los datos económicos del municipio, que siguen siendo un misterio, incluso a pesar de la admonición recibida de parte de la justicia.
Es necesario generar una alternativa que pueda superar estos problemas y construir una ciudad donde se privilegie el interés público por sobre los negociados privados.
El Partido Justicialista, que gobierna la ciudad desde hace 23 años, demuestra una vez más su incapacidad para solucionar los problemas que padecemos los uruguayenses, al mismo tiempo que vuelve a confundir lo público con lo privado.
Este nuevo megaemprendimiento que se aprobó en el Concejo Deliberante, por intermedio de la mayoría automática, que habilita al Ejecutivo a llamar a licitación para el traslado de la terminal y el regalo por 50 años del edificio del ex Mercado Municipal, demuestra una vez más que al PJ gobernante poco le interesan los intereses de la población.
Desde el Ejecutivo y desde el Concejo se negó la posibilidad de realizar una Audiencia Pública para debatir acerca de la conveniencia de este negociado inmobiliario.
El modelo de desarrollo del gobierno local es la timba, que es lo que se llevará a cabo en el ex Mercado Municipal, de llamativa similitud con el negocio de las máquinas tragamonedas que han crecido a lo largo de todo el país de la mano de los amigos del gobierno nacional. A esto se agrega el deliberado abandono de espacios públicos, a esta altura imposible de no ser atribuido a la indiferencia o a la incapacidad del justicialismo. El simple repaso por la interminable lista de espacios de la comunidad que son abandonados por el PJ gobernante llena de asombro (cuando no de vergüenza, si se le muestra a un visitante): el Banco Pelay, el otrora Parque de la Ciudad convertido casi en vertedero, el Parque de La Loba, la Salamanca destruida, los bungalows arrasados, todos los accesos importantes convertidos en asentamientos de mini basurales, la Avenida Paysandú semejando un erial, la Defensa sin mantenimiento, cada plaza o parque progresivamente librado al azar, la Terminal de Omnibus, el acceso a la ciudad, la Oficina de Turismo, el estado deplorable de la mayoría de las calles de la ciudad, las obras realizadas a medias o rajadas a minutos de su inauguración, configuran postales lamentables de una ciudad que decididamente merece otra suerte.
Desde el Partido Socialista seguiremos insistiendo una y otra vez en la necesidad de generar una sociedad más justa y solidaria, que de respuestas a las necesidades que tienen la mayoría de los uruguayenses.
La ausencia de planificación, la ausencia total de política de turismo, el crecimiento geométrico de mini basurales en cada esquina de la ciudad, la falta de agua potable y cloacas que padecen miles de vecinos, los graves problemas ambientales irresueltos por el gobierno local, la recuperación de cada espacio público abandonado por el peronismo gobernante, son las prioridades a la que debemos abocarnos.
Sin participación de los distintos sectores de la ciudad no habrá posibilidades de encontrar soluciones a estos problemas, herramienta que desconoce la gestión local, que en siete años de gobierno no ha convocado una sola vez al pueblo a debatir, ni ha hecho públicos los datos económicos del municipio, que siguen siendo un misterio, incluso a pesar de la admonición recibida de parte de la justicia.
Es necesario generar una alternativa que pueda superar estos problemas y construir una ciudad donde se privilegie el interés público por sobre los negociados privados.
Junta Departamental Uruguay del Partido Socialista
